Conviene destacar por su singularidad y tamaño el antiguo palomar existente en el patio de acceso, constituido por un cajón de muros de fábrica en el que se insertan transversalmente otros muros, convenientemente taladrados para cobijar a las palomas.
En el exterior de la fortaleza han proliferado otras dependencias para acoger funciones estrictamente agrícolas: casa de máquinas, gañanía, estancia y zahurda, extendiéndose por las inmediaciones corrales y cercados para ganado bovino.